Algunas personas presentan una disminución del flujo salival lo que provoca una sensación de sequedad bucal. Normalmente no va asociada a una patología o estado fisiológico por lo que la mejora forma de tratarla es siguiendo unas pautas adecuadas:

  • La nutrición nos ayudará a disminuir la sensación de sequedad y mejora los problemas derivados de ésta como la dificultad de masticar y deglutir. Beber mucha agua, ayudará a mantener siempre la cavidad bucal hidratada. Evitar el consumo de alimentos muy picantes es muy importante ya que éstos pueden irritar la mucosa. También hay que prestar especial atención a la ingesta de azúcares, ya que este consumo asociado a la falta de saliva puede aumentar la aparición de caries.
  • Prestar especial atención a las técnicas de higiene bucal y consultar al odontólogo sobre ellas así como los productos más convenientes para cada caso. El cepillado debe realizarse un mínimo de dos veces al día o después de cada comida, con una duración aproximada de dos minutos. Utilización de hilo dental o irrigadores bucales que eliminaran los restos de alimentos y de la placa bacteriana. No olvidarse de limpiar toda la cavidad bucal, no solo los dientes.
  • El tabaco y alcohol son irritantes y afectan sobre todo a los tejidos blandos, por lo que se desaconseja su consumo o este debe ser moderado.
  • Determinados fármacos pueden producir como efecto secundario a sensación de sequedad bucal. Consulta con tu médico para revisar el tratamiento farmacológico si puede producir como efecto secundario la disminución del flujo salival.
  • Existen productos humectantes y estimuladores salivales que actúan estimulando la producción de saliva de forma natural. Muchos de ellos son de fácil aplicación fuera de casa como son los sprays, comprimidos o chicles dentales. Consulta siempre a un profesional ya que cada paciente es diferente.

Visita regularmente al odontólogo para hacer un seguimiento de la salud bucal y prevenir o tratar cualquier enfermedad bucal.

×